Todos los años cuando llega septiembre, el tiempo de vendimia, llega a La Rioja «El Rioja y los 5 sentidos«. Es una iniciativa que une al mundo del vino de Rioja con la cultura y el espectáculo.

Muchas bodegas celebran actividades de teatro, espectáculos musicales, humor y otro tipo de iniciativas culturales en las que los asistentes, durante el espectáculo catan sus diferentes vinos.
No todas las bodegas son accesibles pero tratamos de buscar todos los años alguna actividad que nos guste en alguna bodega que sí lo sea. Este año hemos visitado BODEGAS Y VIÑEDOS REAL RUBIO, una pequeña bodega familiar en la que cuidan con mucho mimo y esmero sus viñas para hacer unos vinos de excelente calidad.

Como buen riojano que soy, también soy un aficionado al vino de Rioja pero no puedo decir que sea experto. No podría hacer una cata comentada, no sé decir si un vino sabe a esto o lo otro pero sí se cuando un vino me gusta y sin lugar a dudas, los vinos que caté en esta ocasión me encantaron. La ventaja de estas pequeñas bodegas es que su producción es muy limitada, mimada y controlada. Sus vinos son un poco como sus hijos y por eso son espectacularmente buenos.

En este caso además es una bodega accesible para silla de ruedas. Está construída en una única planta y puede visitarse íntegramente sin problema alguno (Nave de barricas, nave de elaboración, enotienda, terraza, aseo…)
El espectáculo de ayer corría a cargo de Bufa & Son, un trío musical que interpreta cualquier tipo de pieza con unos instrumentos de lo más originales. Utilizan material urbano como instrumentos de viento. Escobas, escaleras, manillares de bicicleta, muletas e incluso la rueda de una silla de ruedas, son los materiales que utilizan para hacer música.

Era la primera vez que llevábamos con nosotros a Fran a un espectáculo musical y fue increíble. Con menos de dos meses de vida se portó como todo un chavalote. No lloró en ningún momento y estaba encantado con los colores y las luces de la bodega. Miraba todo lo que le rodeaba con sus pequeños ojitos como queriendo descubrir algún tesoro.

Fue una experiencia muy positiva que nos da pie para repetir nuevas iniciativas y nuevos viajes con nuestro pequeño nuevo viajero. Que un lugar sea accesible nos facilita mucho la vida a todos y permite que no sólo los usuarios de silla de ruedas salgamos y viajemos, sino también las familias que tienen niños pequeños que van en carrito o silleta.

¡¡¡Esperamos contaros pronto otra escapada!!!
Escrito por Kity.
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