Tras la fabulosa visita a Gijón, que os relatamos en una entrada anterior, nos sumergimos en la singular ciudad de Avilés, ubicada en el centro costero de Asturias: una ciudad que fusiona armónicamente las huellas de la edad media, que encontramos en su casco histórico, los vestigios de la era industrial, que intuimos al conocer los puertos comercial, deportivo y pesquero, y la magnificencia de la edad contemporánea, representada con el Centro Niemeyer.

Primero, comimos en una de las sidrerías de Tierrastur, que es una red de restaurantes típicos del Principado de Asturias. Ofrecen gran variedad de platos , elaborados con productos frescos de la tierra, como parrilladas de pescados, verduras o carnes, tablas de embutidos y quesos, raciones, los tradicionales ‘Tortos’, entre otras delicias. El local es espacioso, su ambientación y decorado es al más puro estilo asturiano y el personal es encantador, quienes te sorprenderán con el arte que tienen al escanciar la sidra. Eso sí, la carta tiene más de 20 páginas con numerosas opciones, por lo que me llevó cierto tiempo elegir y a mi acompañante leérmela ;).


A continuación, hicimos una visita guiada por el casco histórico, conocido como la ‘villa medieval de Asturias’. Es un conjunto de calles peatonales, dispuestas en forma de ‘h’, en las que podemos ver palacios, plazas, soportales e iglesias de los estilos románico, gótico, barroco y modernista. Resulta muy agradable acercarse y tocar la piedra de estas joyas del medio evo y descubrir sus formas, texturas y decoraciones. Caminar por esta zona es muy cómodo, ya que el suelo es uniforme y sin resaltes, un verdadero ejemplo de que un centro histórico puede conservar su belleza y atractivo sin tener que por qué mantener suelos adoquinados e intransitables. Aquí también está el Ayuntamiento de la ciudad, que guarda un cierto parecido al de la capital asturiana.


Finalmente, terminamos nuestra visita a Avilés, paseando por la ría y tomando un café en el Centro Cultural Niemeyer. Se trata de un complejo cultural integrado por 4 edificios unidos por una gran plaza, y constituye la única obra del arquitecto brasileño Oscar Niemeyer en España. Resulta impactante la gran amplitud y sensación de ser una hormiga en medio de tan imponente estructura.

En las siguientes entradas, os contaremos nuestro viaje por Asturias con perro guía, descubriendo parte de la Asturias prehistórica y natural.
Post escrito por Zuriñe Arzola